¿Por qué mi Gato no quiere Comer?

Cuando nuestras mascotas dejan de comer como lo hacen siempre, comenzamos a pensar mil cosas que aumentan nuestro nerviosismo. Pero tranquilo, en este post podrás resolver la duda ¿Por qué mi gato no quiere comer?

Lo primero que hay que tener en cuenta es que sensación de saciedad y el hambre se regulan por factores como el sistema nervioso central y el tracto intestinal y evidentemente los desórdenes en estos sistemas pueden hacer que nuestro gato deje de comer.

¿Qué pasa si mi gato no quiere comer?

Evidentemente como cualquier ser vivo, el gato no puede pasar periodos largos sin comer porque puede desarrollar lipidosis hepática felina, una enfermedad que podría ser mortal.

Por lo que lo primero que debemos hacer cuando esto ocurre es analizar las posibles causas, y si tiene más de 24 horas sin comer lo mejor es ir directamente a nuestro veterinario de confianza, pues si pasa más tiempo sin alimentos el riesgo de sufrir del sistema hepático es muy alto.

¿Qué es la Lipidosis Hepática?

En gatos, la lipidosis hepática es el almacenamiento de grasas en el hígado, esta afección puede derivar en una retención de bilis, y finalmente en insuficiencia hepática.

Esto puede llegar a ser mortal, y se produce tras un ayuno prolongado o de forma espontánea en gatos con sobrepeso, de allí la importancia de observar con atención los hábitos alimenticios de nuestro gato.

Analiza si tu gato no quiere comer o no puede comer

Una de las primeras cosas que hay que distinguir es entre la inapetencia verdadera, es decir cuando el gato por voluntad no quiere comer, y la incapacidad de comer, cuando el gato quiere comer, o tiene hambre, pero no puede ingerir alimentos.

La diferencia entre estas dos radica en las causas, si son físicas probablemente tenga incapacidad de comer por alguna afección o dolor, en cambio si es inapetencia puede ser debido a causas psicológicas.

Recuerda que la sensación de apetencia o de saciedad en los seres vivos va regulada por dos sistemas, el sistema nervioso central y el sistema gastrointestinal o digestivo, y cualquier afección es estas dos puede quitarle el hambre a tu gato.

Generalmente la inapetencia o disminución del hambre en gatos se debe al cambio de alimentos, sin embargo, esto se resuelve fácilmente volviendo al alimento que anteriormente nuestro minino comía.

En cambio, en los casos más graves puede ser debido a enfermedades complejas.

Evalúa las posibles causas del porque tu gato no quiere comer

Como mencionamos antes puede deberse a un cambio de alimentos, o porque a tu gato no le guste la comida que le ofreces, recuerda que los gatos son animales muy exigentes en cuanto al gusto.

También podría deberse a que el sitio donde colocaste su plato no es el adecuado, puede que tu gato no quiera comer cerca del arenero, o de la lavadora por el ruido que hace.

Otra de las razones más comunes por las que el gato deja de comer es por estrés. Por ello, analiza si hubo algún cambio en la rutina del hogar que pudo haberle afectado a tu gato, probablemente sea esto lo que le esté causando estrés o ansiedad.

Si luego de analizar estas causas no encuentras la razón, debemos descartar que el gato presente dolor en alguna zona del cuerpo (incluyendo su boca o dientes), tenga algún tipo de enfermedad hepática, envenenamiento o intoxicación por alimentos.

Generalmente si la inapetencia es prolongada podría deberse a una cuestión del sistema gastrointestinal.

¿Qué hacer si mi gato no quiere comer ningún alimento?

En todo caso, si has revisado una por una las posibles causas, has tratado de solventarlas y no ves ninguna mejoría, lo mejor es ir directamente al veterinario, así evitas problemas mayores.

Pues que un gato esté 24 horas en ayunas es causa inmediata para visitar a nuestro veterinario de confianza.

De igual manera, te dejamos acá abajo algunos tips para seguir si tu gato no quiere comer

Diversifica la dieta de tu gato

Tal y como pasa con los humanos, los gatos se aburren de comer siempre el mismo alimento. Además, los gatos son muy exigentes con su comida, por lo que probablemente tu mascota quiera degustar algo distinto que satisfaga su hambre.

Intenta variar las texturas o sabores, si usualmente come pienso o comida enlata, intenta que estas sean variadas.

Encuentra el mejor sitio para colocar el plato de tu gato

Recuerda que el momento de la comida debe ser tranquilo, por eso su plato debe estar en un sitio de fácil acceso para él, donde no haya interrupciones, o sonidos fuertes que lo distraigan o asusten.

Presta atención también si el plato está cerca del arenero, por ejemplo, pues los gatos son rigurosos con su higiene y odiarían comer donde hacen sus necesidades.

Por otro lado, algunos veterinarios recomiendan que el plato de comida esté alejado de su recipiente de agua, pues en la naturaleza los gatos no tienen estos dos juntos, al contrario, cazan y luego deben buscar donde saciar su sed.

A su vez, otros recomiendan que sus platos o cuencos, estén pegados a la pared, pues muchos gatos ven la hora de la comida como un momento vulnerable, por el hecho de estar agachados y distraídos, entonces, al estar frente a la pared disminuye su estrés por un ataque inesperado.

Si tu gato no quiere comer, ofrécele raciones pequeñas

Ten en cuenta que los gatos son cazadores habituales por lo que por naturaleza les gusta buscar ellos mismos su comida.

Por esto, coloca pequeñas raciones de comida en distintas zonas de la casa, así evalúas si esta puede ser una de las causas de su inapetencia.

Pequeñas raciones son menos abrumadoras para un gato que no quiere comer y así también nos aseguramos que la comida se mantenga fresca y en buen estado.

Puede que el plato, no le guste mucho a tu gato

Analiza si el cuenco de comida donde le sirves es el ideal, por ejemplo puede que sea muy hondo y no llegue con facilidad a la comida, o tal vez se mueve mucho cuando intenta comer.

Por eso te recomendamos que busques un plato llano o plano, que tenga sistema antiresbalante, es decir que no se mueva por el piso cuando tu gato este comiendo. Hay muchas variedades en el mercado, probablemente consigas uno en tu tienda de mascotas favorita.

Sienta a tu gato en la mesa contigo

Como todos sabemos los gatos aman la atención así que prueba si come sentándote a comer con él, o dándole tú mismo pequeñas porciones de comida, así lo animas a comer, y tendrás la tranquilidad de saber que tu gatito comió al menos unos bocados.

Tratando siempre de darle un extra de cariño y atención, podrás hacer feliz a un gato estresado o un gato que tiene algún malestar que le impida comer, lo importante es que consuma aunque sea poco alimento hasta que puedas llevarlo al veterinario.

Hazles las comidas más divertidas a tu gato

Como mencionamos antes, a los gatos les encantan los retos, así que puedes probar escondiendo pequeños bocadillos en una caja más grande junto con otros objetos como papel o cartón para que tu gato pueda explorar y se diviertan encontrando los bocadillos.

Calentar la comida de tu felino también puede ser la solución

Si guardas la comida enlatada de tu gato en la heladera o nevera, puedes sacarla una hora antes de dársela para que pierda un poco el frío.

Si le estas dando comida sana casera caliéntala un poco, incluso si le das alimentos secos puedes calentarlo un poco en el microondas y esto lo hará estar un poco más blando y comestible.

¿Es mejor la comida para gatos enlatada o seca?

Todo depende del gusto de tu felino, algunos prefieren la comida enlatada a las croquetas, pero puedes hacerle una dieta variada, ir alternando entre una y otra para evitar que tu gato se aburra de su comida.

Pon su plato de comida en un sitio más alto

Si tu gato es mayor puede que tenga problemas para agacharse a comer, tal vez por dolencias en sus articulaciones debido a su edad, por eso, puedes ayudarlo colocando su plato a la altura de su cara.

Comida para gatos que no quieren comer

En primer lugar, si tu gato no tiene alguna enfermedad mayor, por la que debas seguirle una dieta específica, puedes darle alimentos que le resulten apetitosos, como por ejemplo pollo hervido en tiras, o pavo, acompañado con arroz blanco.

Siempre teniendo cuidado de no agregar condimentos, o sal a ninguno de los alimentos. Lo que si te recomendamos es que el arroz puede quedar un poco más cocido de lo normal, pues los gatos prefieren alimentos blandos y estos son más fáciles de comer para ellos.

Los alimentos o carnes crudas no son recomendables como alimentos regulares, pues esta puede estar infectada con parásito u otros organismos que pueden ser perjudiciales para su salud.

Otro alimento que te puede ayudar a incentivarlo a comer, son las sardinillas enlatadas, aunque ten en cuenta que estas no pueden constituir una alimentación balanceada, es decir, utilízalas para que pueda comer en esos momentos donde está inapetente, pero no se la incluyas con tanta regularidad a su dieta.

Comida líquida para gatos

Si aun cuando le ofreces varias opciones, tu gato sigue sin comer, puedes probar haciendo papilla estos alimentos y dándoselos con una jeringuilla sin aguja, pues lo importante es que coma aunque sea poco, para evitar males mayores.

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